Declaración pública del prisionero político Hardy Peña, Chile

by antonio recabarren Tue Jan 03, 2006 08:08 arecabarrenh at hotmail dot com

Me parece bien que un ser humano luche por su libertad, sin embargo me parece mal que existan seres humanos de diferentes categorías: "presos políticos y "presos sociales"; unos sangran, los otros no, unos sufren, los otros no.
Es verdad que unos lucharon por un ideal, sin embargo los otros delinquieron por que falló el ideal. ¿Cúal es la diferencia?
¿Acaso no son los dos sectores presos políticos?
Aquel niño que nació en la marginalidad, ¿tiene culpa de estar hoy en la cárcel?
Viva la rebelión, vivan los motines, ojalá lleguemos a lo que se vive en brasil.
Muerte a los cancerberos.
Muerte a todos los que se esconden en la política, para cumplir sus anhelos.
Los marginales y maltratados tenemos sed de venganza. Viva la delincuencia social.

by José Antonio Gutiérrez - OCL-Chile Tue Jan 03, 2006 20:24

Uy compadre, qué espinudo el tema. Pero la verdad es que tu análisis es profundamente erróneo: porque echas todo en un mismo saco. A nosotros también nos parece mal que existan seres humanos de "diferentes" categorias -especialmente cuando estas categorias se convierten en clases sociales. Pero vivimos en una sociedad en que esas categorias existen y es necesario reconocerlas para transformarlas; de la misma manera, es necesario reconocer las diversas motivaciones en las personas.

Te pongo un ejemplo, un compa que es apresado por la lucha, merece todo nuestro apoyo, por razones obvias; pero un violador, usted me disculpará compa, no es alguien cuya libertad me entusiasme demasiado. No es lo mismo alguien que esta preso por organizar a su población, que alguien que esta preso por envenenar a esa misma población con pasta base. No es lo mismo alguien preso por causas "sociales", que alguien preso por causas "anti-sociales". De la misma manera, no es lo mismo alguien que roba a los ricos, que alguien que roba a los pobres. Si Pinochet se fuera preso, saldria usted a pedir su liberación por oponerse en principio a la cárcel? Y por qué los anarquistas no levantan un comité de apoyo al Mamo Contreras, a pederastas como Spiniak o a Fujimori? Ellos también son presos, según usted, igual que presos politicos como Hardy. Según mi visión, (y afortunadamente, la de la mayoria del movimiento) las diferencias son demasiados obvias como para tener que discutirlas.

Esos son sólo algunos ejemplos de la debilidad de su argumento compa.

Y nadie niega que todos los seres humanos sufren y lloran y sangran; afirmar que los luchadores por la libertad de los presos politicos desconocen eso, es malintencionado y ridiculo. Por eso en principio nos oponemos a la tortura, por ejemplo, y denunciaremos la inhumanidad de un sistema carcelario que trata a los pobres como animales, mientras a los ricos les permite estar en mansiones tras las rejas como el anexo cárcel capuchinos (si hasta tienen nombre de "resort")

Sé que el sistema carcelario no es la solución, sé que éste responde a una estructura de clases, pero de ahi a reclamar que todos los presos son lo mismo hay mucho trecho. Nuestra critica al sistema carcelario no es una critica "humanista burguesa", sino una critica clasista; nuestra oposición de prinicipio al sistema carcelario, no significa que consideremos "correctas" actividades anti-sociales penalizadas, como el homicidio, la violación, etc... este es un punto muy importante, ya que afirmar lo contrario es validar la visión burguesa de que el anarquismo es caos, violencia, dejar hacer a todos cualquier cosa que quieran, por deplorable que sus actos sean.

Nuestra critica nace del hecho de que las cárceles no solucionan los problemas que generan las conductas anti-sociales; que el trato es inhumano y no garantiza la reincoporación del individuo a la sociedad, sino que es una escuela de la brutalización; que refleja las contradicciones de clase al penalizar los crimenes de los pobres, pero deja impune la explotación y el fraude de la burguesia -o a lo más, lo penaliza en los "resorts" con rejas. En este sentido, y sólo en este sentido, se puede afirmar que todos los presos son "polticos", porque es la sociedad capitalista la que crea el crimen, no sólo con la creación de la marginalidad y la desigualdad, sino que además, por la valoración del dinero por sobre el trabajo (para qué desarrollar una actividad que puede tener un efecto positivo sobre la comunidad, por ejemplo en un consultorio, si puedo hacer más plata traficando?).

Y todos los grandes pensadores anarquistas, desde Bakunin en adelante, han visto que ante la presencia de actos anti-sociales la comunidad no sólo tiene el derecho a defenderse, sino que además, tiene el derecho a actuar para prevenir que esos individuos sigan perjudicando a sus semejantes. Ciertamente, nuestra solución va a la raz de los problemas y busca un trato humanitario.

No se puede satanizar a todos quienes están tras las rejas como hace la prensa burguesa; pero tampoco es aceptable idealizar y envolver en lirismo el mundo delincuencial: la verdad, es que junto a quienes roban por necesidad, hay anti-sociales, hay individuos que perjudican a su propia clase y no son parte de ninguna rebelión de los de abajo, sino que su psicologia los acerca más a la fiolosofia del enriquecerse a toda costa burguesa. En esos contingentes, tradicionalmente, la burguesia ha extraido matones y sicarios para enfrentar a los grupos revolucionarios (si no, mira el más claro ejemplo en el mundo: el crecimiento de los paramilitares y sicarios en Colombia), para destruir los trabajos populares y aún lo vemos hoy, los traficas han destruido las organizaciones populares en poblaciones antiguamente combativas.

Si los anarquistas no somos capaces de articular un discurso coherente entorno a la anti-socialidad, si no somos capaces de demostrar con argumentos que ésta es la prueba más evidente del fracaso de la burguesia y de usarla para demostrar como la anti-socialidad es producto de la sociedad en que vivimos, dejamos este tema en manos de la burguesia. Asi, Lavin y los security-boys tienen caldo de cultivo para aumentar su popularidad. Y junto al demonio de la "delincuencia" seguirán teniendo una excusa para endurecer la mano a los luchadores.